Una
de las más curiosas especies endémicas de México por su gracioso parecido a un Pokémon,
es el Ajolote (Ambystoma mexicanum) que en náhuatl es conocido como Axolotl, que significa
“monstruo del agua”. Otro posible significado prehispánico es el de “perro de
agua” por la palabra atl, que significa agua y xólotl que puede interpretarse
como perro. Por otra parte, la palabra Ambystoma que forma su nombre
científico, significa “boca en forma de copa (invertida) o boca achatada”,
debido a su boca grande y ancha.
Alebrijes de Xochimilco
jueves, 14 de abril de 2016
miércoles, 13 de abril de 2016
Descripción
Podemos describir al Ajolote
Mexicano como un anfibio con adaptaciones asombrosas, como la capacidad de
conservar sus características larvarias aun cuando madura sexualmente, fenómeno
conocido como neotenia.
Ajolotes con diferentes pigmentaciones. |
Su apariencia básica es la de un
renacuajo gigante, con patas y cola. Su piel es lisa en casi todo el cuerpo,
aunque puede ser ligeramente rugosa y con pequeños poros que solo se aprecian
de cerca. Su cabeza es robusta, ancha y plana, contrastando con el resto de
cuerpo que es más alargado y aplanado por los lados. Sus ojos son pequeños y
sin párpados. El cuerpo tiene 12 pliegues de cada lado. Una característica
distintiva son los tres pares de branquias que salen hacia atrás de la base de
la cabeza. A la altura de sus branquias, en el dorso, tiene una membrana rígida
que se prolonga toda la cola formando una aleta. Las patas tienen dedos finos y
puntiagudos que no desarrollan uñas, cuatro dedos e las patas anteriores y
cinco en las posteriores.
Su coloración
puede ser muy variable. Debido a la variación de diferentes genes, el patrón de
coloración puede tener varios tonos, especialmente en cautiverio: de gris, de
café, de verde pardo, anaranjado, blanco con ojos negros, albino dorado, albino
blanco, o casi negro (melanoide). Mide
en promedio 25.7 cm de largo de la cabeza hasta la cola, e individuos mayores a
los 30 cm son raros. Su cabeza más ancha que larga, mide de 3.3 a 3.7 cm. Pesa
de 60 a 110 g, y en promedio 85 g. su boca es grande y tiene alrededor de 126
pequeños dientes maxilares y premaxilares, y de 18 a 20 dientes
vomero-palatinos que están ubicados adentro de la cavidad bucal. Su lengua es
retráctil.
martes, 12 de abril de 2016
Comportamiento
Nuestros Alebrijes de Xochimilco se comunican entre sí mediante señales químicas y visuales,
pero esto ocurre mayormente durante el período de apareamiento. Otra forma de
comunicarse se da por medio de las feromonas, también en la etapa reproductiva.
Es solitario, escurridizo y aún no
se conoce ningún tipo de interacción entre individuos, excepto en el
apareamiento.
En cautiverio viven hasta 30 años, mientras que en vida silvestre
solo tres, a veces hasta seis años. Se piensa que actualmente, la diferencia se
debe a la contaminación. La respiración la realiza por medio de las ramas
branquiales en un proceso de intercambio de gases a favor del gradiente: el
oxígeno del agua pasa a los capilares y a la sangre y el dióxido de carbono al
agua. También tienen sacos pulmonares parcialmente desarrollados, por lo que
ocasionalmente sube a la superficie a tomar bocanadas de aire.
Normalmente, el ajolote permanece casi
inactivo en el lecho del lago durante el día y sale esporádicamente a la
superficie del agua para respirar. Al anochecer sale de su letargo y va
en busca de alimento. Son capaces de identificar campos eléctricos y capturar a
sus presas gracias a ello y a su facilidad de detectar las señales químicas.
Su dieta es amplia,
come pequeños peces, renacuajos, insectos acuáticos, lombrices, crustáceos y
moluscos de agua dulce. Cuando son larvas pequeñas se alimentan de zooplancton,
formado por crustáceos microscópicos como copépodos, cladóceros (pulgas de agua:
Moina macrocopa, Simocephalis vetulus, Alona rectangula, Macrothrix
triserialis.) y rotíferos (animales microscópicos de no más de 0.5 mm de largo
con aparato bucal complejo) como Brachionus spp.
En cautiverio pueden comer una
gran variedad de cosas, incluyendo croquetas especiales para tortugas, grillos,
tubifex, artemias, tenebrios (larvas de escarabajo) y hasta
pollo. Para encontrar su alimento se guía por el olfato. Para ingerirla, la
absorbe hacia su estómago. Pueden
pasar varias semanas en ayuno.
Un dato
interesante: el ajolote tiene
tendencia a satisfacer su apetito con otros ajolotes.
Entre
los 12 y los 18 meses de edad, el ajolote alcanza la madurez sexual y por
lo tanto, está listo para reproducirse. Se
reproduce en los meses de diciembre, enero y febrero, una sola vez al año. Los
machos se pueden distinguir por su cloaca (orificio reproductivo y excretorio)
más alargada que la de la hembra.
El apareo se realiza
después de un breve comportamiento de cortejo, en el que al principio, juntan
la región de las cloacas, para después realizar una especie de baile lento,
moviéndose en círculos. El macho se aparta mientras mueve de forma ondulada la
parte posterior de su cuerpo y cola, mientras la hembra lo sigue.
Posteriormente, el macho agita vigorosamente la cola por aproximadamente medio
minuto, al hacer esto libera una masa gelatinosa con una cubierta de esperma en
forma de cono, llamada espermatóforo y continúa moviéndose hacia adelante; la
hembra se desliza sobre el espermatóforo recogiéndolo con la cloaca.
Aproximadamente 24 horas después de la fecundación,
la hembra libera entre 600 y 1,500 huevos fecundados. Eclosionan después de 11
a 15 días, y las larvas pueden madurar sexualmente al cumplir el año, aunque
esto varía según el individuo.
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